UNA OLA AMARILLA

Por Ariadna Sánchez

Es muy curioso. A pesar de la noticia sobre el falló que ya dio el Tribunal no me siento ni ligeramente desmotivada.Hoy, a partir de las 10 de la mañana al rededor de 20 automóviles realizamos una caravana que recorrió dos de los principales boulevares de la zona oriente de Tijuana. Empezamos 20 autos pero terminamos alrededor de 50.

Mucha gente supo de la carvana por radio, televisión y por medio del blog. Lo genial en todo esto fue que durante el trayecto varios automóviles se unieron a la larga fila de autos que no dejaban de sonar sus bocinas.

Por mi retrovisor no alcanzaba a ver la punta trasera de la caravana. Mucha gente se unió. Otra tanta nos veía pasar y nos apoyaba con gitos y aplausos. Otros autos que no se agregaron a la caravana nos hacían unísono con susbocinas.Y pienso, después de ver que en Tijuana habemos muchos RENEGADOS que nada de lo que pueda pasar de aquí en adelante terminará con mi convicción y mi compromiso de permanecer por siempre en lucha constante por un mejor país.

Pase lo que pase, decida lo que decida Andres Manuel, millones de personas lo apoyaremos. Porque ya somos millones que estamos dispuestas a luchar por la construcción de una verdadera democracia.Ahora lo que sigue es estar atentos, dispuestos y sobre todo, afinar y perfeccionar nuestras formas de resistencia civil. Porque la democracia no se contruye el día en que vamos a votar... nuestra democracia debe construirse diario, informándonos, estando en contacto, reuniéndonos para conversar sobre lo que sucede y lo que podemos hacer.

Nuestra democracia tiene como base nuestra convicción y entereza ante los diferentes momentos que implica el proceso de construirla.